La creación del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) requirió una serie de modificaciones a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y diversas leyes para otorgar atribuciones a la Secretaría de la Función Pública en materia de coordinación de la Administración Pública Federal.
En 2016, se promulgaron las nuevas leyes secundarias siguientes:
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Ley General del Sistema Nacional Anticorrupción.
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Ley General de Responsabilidades Administrativas.
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Ley Orgánica del Tribunal Federal de Justicia Administrativa.
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Ley de Fiscalización y Rendición de Cuentas de la Federación.
También se modificaron tres leyes existentes: